La maldad en mÃ
La maldad en mà disminuye porque a tu presencia siempre huye. La maldad en mà se difumina cuando una sonrisa de tus labios se avecina. La maldad en mà se encoge y se retuerce pues en mi interior eres tú el que crece. La maldad en mà se vuelve nula pues tu amor por mà la anula.