Desierto azul

                                                        
Vagando por el desierto azul
mis huellas se humedecen dentro
del frío yermo de una soledad
completa.

Avanzo poco, el viento gélido
penetra entre mis huesos,
convencido de marchar, sigo;
aun sintiendo tanto pesar.

Consciente de haber perdido
el camino, no tengo más
que ver el horizonte, para
chocar con un monte congelado.

Sintiendo tanto miedo, no hay
nada que me devuelva la vida
o vida que me devuelva la razón.

Desolado, dejo de sentir mi
latido, creo que ya se ha perdido;
me queda poco tiempo, por más
que lo intento, no puedo continuar.

Mis rodillas se doblegan,
mis párpados se pliegan,
mi respiración se hace tenue,
mi corazón se funde con el frío
dejo solo mi recuerdo, que se
queda contigo, por el desierto azul.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Gracias

Yo cuidaré de ti

Amanecí pensando en ti

El amor es otra cosa

Te amo, te valoro y te respeto

Hermana mía, Carmen Lucía

El vigor del maíz

Contigo viene la calma

Que salga a flote tu niño interior

Estoy en deuda