El Gusto de Escribir

Vamos a dar un paseo enseñarte las bellezas de la vida, quiero. No hace falta llevar los cuerpos, es un paseo sin hablar, solo se trata de apreciar. Vente, déjate llevar cierra los ojos, puedes imaginar, un lugar cálido y tranquilo, un bosque rodeado de paz. Respira profundo, siente la belleza del lugar aprecia hasta la cosa más sencilla, las piedras,los árboles, las hojas, el viento, la tierra, vamos a festejar. Se agradecido de tener la fortuna de estar, aquí y ahora ama, déjate atrapar por el regocijo. Juntemos las manos para exaltar las bendiciones que has recibido y las que están por llegar.

Te falta valor para encontrar lo bueno, para saber que es lo correcto, para dejar lo negativo. Te falta valor para ser positivo y no ver más allá que tu ombligo. Te falta valor para sacudir todo lo malo y dar gracias por los milagros recibidos. Te falta valor querido amigo, o acaso estás confundido, despierta. Lo que más te hace falta es amor.

Sigues igual la vida no te trata mal, pero lejos de agradecer siempre te tienes que quejar, para luego enfermar. No entiendo tu comportamiento, en la vida no estás contento. Te sugiero valorar y amar lo que te han dado prestado y aprovechar cada segundo milagroso otorgado, con esa actitud no llegarás a ningún lado. Te quiero, y espero que tu vida se llene de tantas cosas buenas que resplandezcas de salud, gozo y beatitud.

Dulce niña bonita de ojos grandes eterna y silenciosa cuando tu alma reposa. Ramo de rosa que decora y da vida a lo que rodea. Lucecita, porque tu luz es la que enciende los destinos que ahora están en tus manos. Lucecita, guapa y decidida así te muestras en la vida, eres muy querida, dulce hija mía. Lucecita, tesoro del destino que Dios bendiga siempre tu camino. Te amo

Nubes mudas que bailan blancas y oscuras de muchas formas se disfrazan, para representar tantos escenarios. Las vemos pasar silenciosas, todas son hermosas, te invitan a crear. Nubes sin palabras pero tan necesarias, de vida nos llenan, de Sol nos protegen. Silenciosas y discretas van como flotando para desempeñar su papel a diario. Aunque están a merced del viento, se expresan como lo que son y retozan de contento.

Me fascina tu aullido de niño perdido, rezongando por cariño. Me atrae tu talante frente a la Luna elegante, con ojos de mar y hiedra. Me gusta tu bravura entre noble y oscura, aunque de tu mordedura nadie se salva, en tu aliento hay tibieza de dulzura. Salvaje a todas luces, solitario y ensimismado pero necesitas de todos los que están a tu lado. Tu caza es voraz, aunque quieras perderte de la faz de la Tierra, en su sistema eres necesario, amigo lobo solitario.

Somos como árboles todos inmensos, frondosos cada quien con su tono hermoso. Somos como árboles de tronco perfecto, aunque no sea recto, todos tenemos tanto de bello. Somos como árboles, hasta el que no tiene hojas es necesario se visten de vida a diario. No importan las diferencias todos tienen un mismo sentido. Somos como los árboles con sus tonos maravillosos dando oxígeno para el camino, en donde escribimos de verde nuestro destino. Somos como árboles con sus inmensas raíces, sus bellas hojas, todos decorando el bosque de vida, felices.

Me encanta la Luna tiene algo de mágica y de compañera, de tibia y de espera. Me encanta la Luna llena de sentimientos se desvanece por la mañana, inspira al amor, nunca daña. Me encanta la Luna con su soledad completa, siempre tan quieta. Me encanta la Luna parece una fina dama con su chal de estrellas se acompaña. Me encanta la Luna porque es silenciosa de vista hermosa. Sencillamente me encanta.

Ya te dije que te amo, con todo lo que se describe como humano. Ya te dije que te amo, con la sencillez de un simple ramo. Ya te dije que te amo, con la elocuencia de una sentencia. Ya te dije que te amo, de cerca y en lo sublime de lo lejano. Ya te dije que te amo, con la intensidad del reflejo del Sol en el tesoro mágico de Luna. Ya te dije que te amo, con todo y lo que según tú haces mal. Ya te dije que te amo, como el ser maravilloso que eres. Ya te dije que te amo, con toda tu imagen corporal y tus destellos de celestial. Es cierto, te amo. P. D. De Dios para ti

No me alcanzan las palabras para describir toda las felicidad, no me alcanzan las inhalaciones para asimilar todas las emociones. No me alcanzan las oraciones para agradecer tantas y tantas bendiciones. No me alcanzan las letras para describir las hermosuras de la vida. No me alcanzan las horas para bendecir a mis cercanos en cada momento. No me alcanzan los minutos para hacer tantas cosas alegres y bien hechas. No me alcanza la vida para agradecer este día con su mágica armonía.

Al golpe de Sol nace una melodía hermosa. Que danza y se mece en la bienvenida de este nuevo día. Al golpe de Sol se van asomando miles de aves volando. Al golpe de Sol van cabalgando ángeles de colores con tonos de flores. Al golpe del majestuoso Sol se va golpeando un día maravilloso que se va fraguando. Al golpe de Sol mi sonrisa se va creando, bienvenido Sol a este tu nido, un corazón sencillo.

Para vivir necesitas percibir lo bueno que circunda, la maravilla que tu vida inunda. Para vivir no te olvides de sentir el olor vigoroso del capullo. No dejes de oír la melodía dichosa que te haga vibrar. Para vivir debes apreciar lo que tu alma sabe albergar. Para vivir no olvides sentir lo valioso de ver hacia dentro. Para vivir aprecia cada milagro que despierta junto a ti cuando andas por ahí.

Me avisas cuando te vayas de aquí, para dejar de verter los rayos de luna que alumbran tu camino. Cuando te vayas me anticipas, para que disipe el polvo del ángel que en la entrada espera. Cuando te vayas despídete, para que extienda el abrazo de mi alma. Cuando te vayas me lo comunicas, para preparar tu maleta y dejar caer todas las memorias de tu historia. Cuando te vayas visítame, para despedirnos con dulzura de este mundo. Recuérdame cuando te vayas.

Hasta el fin sabré querer dar y amar. Hasta el fin sin conformarme puedo llegar siempre más allá. Hasta el fin jugando con las letras, sin perder sinceridad. Hasta el fin con uno, con todos con un objetivo claro, el amor de un niño involucrado. Hasta el fin carcajearse de la vida positiva concebida. Hasta el fin con mucho amor a mi alrededor, tapizada de cariño, hasta el fin.

Fundido en mí un brillo de estrella, un polvo celestial. Fundido en mí lágrima de pétalo de rosa que me baña. Fundido en mí una brisa de amor que me acompaña. Fundido en mí la solana alegre de la mañana. Fundido en mí la risa del viento, la voluntad del tiempo. Está fundido en mí como en ti.

Ya te fijaste que pese al desgaste de la vida sigues con alegría. Ya te fijaste que no a todos les caes bien, pero hay muchos que son afables y solidarios. Ya te fijaste que todos tenemos algo bello para mostrar. Ya te fijaste que cuando das con amor siempre se multiplica la bendición a tu favor. Ya te fijaste que si pides amablemente todo se hace más fácil, y te salen mejor las cosas. Ya te fijaste que cuando damos con amabilidad recibimos bondad. Ya te fijaste que lo positivo es armonía y que siempre brilla.

El mundo a mi favor me recuerda que cada cada día puedo ser mejor. El mundo a mi favor me dicta que soy bendecida con el milagro de la vida. El mundo a mi favor cimenta lo bello de un día pleno con un sorbo de algo amoroso, aunque sea un sueño. El mundo a mi favor lleno de amor, me avisa que todo sin prisa se logra. El mundo a mi favor manifiesta de lo bueno mucho de lo malo poco. El mundo a mi favor me bendice cuando dibuja mil sonrisas a mi alrededor. Sin durar me hace afirmar existe y vivo con un mundo a mi favor.

Convertirte en mejor persona ahora que un año nuevo se asoma, dejar tus supuestos vicios para tener más beneficio. Convertirte, en buena gente para que este año te vean diferente, iniciar tus metas de la nueva temporada que terminarán luego en nada. Convertirte, en el que hace favores para que te tomen en cuenta, y sepan que pueden contar contigo de mil amores. Convertirte en qué, en el encaje de lo que se espera, te esfuerzas para llegar al estándar aceptado y que nunca seas criticado.   Es mejor seguir como hasta el momento, siendo tu verdad, sin contornos ni apariencias. Sin convertirte en nada que no nazca de tu interior, solo ser quien eres, eso es perfecto y suficiente. Eres un ser maravilloso.

Regálame dulzura con tu mirada, pureza con tu sonrisa, gentileza con tu cuidado, confianza con tu amistad. Regálame tu presencia, en cada navegar tu calma en las bravuras del mar, tu paz en mi caminar. Regálame tu amor en botón de rosa los colores alegres de la vida los buenos deseos, los mejores anhelos. Regálame un bonito recuerdo, un dulce momento, todo lo celestial de un encuentro. Regálame la tranquilidad de la mente la pureza de la gente, la idea creativa y diferente. Regálame no quiero nada material, sólo sumergirme en tu oasis, en el gozo de tu virtuoso manantial.

En el mercado te encontré justo cuando de amor estaba necesitado. Aunque había tanta gente solo en ti me fijé, de manera diferente, tú sonriente... Luego te busqué, sin respuesta, me decepcioné pero entonces ahí estabas con tu verde mirada de niña, aunque la vida por ti ha pasado; yo me siento enamorado. Juguemos a la infantil locura de enamorarnos sin cura. A tus cincuenta y mis setenta y tantos años juntos pasamos los cien, olvidemos a quien eso importa. Todo tuvo su momento, lo que pasó murió con el tiempo, todo salió bien en su momento. Aunque los dos hemos tenido retrocesos,  nuestras aventuras y progresos,  dejemos que nos abrace un poco de gentileza. Quedémonos juntos para descubrir nuestros aspectos positivos, y hacer intercambios con júbilo del cosquilleo del amor.

                                       En un lejano lejano bosque, vivía  un pequeño duende vivaracho y simpaticón. Todo lo hacía con alegría y emoción, solo adolecía de un pequeño problemilla, nombre no tenía, y así había vivido toda su vida. Nadie sabía cómo se llamaba, todos le decían pequeño duende. Sucedió que un día,  su sombrero verde se le perdió. ¡Vaya, que situación! ese sí que era un problemón. Porque en él guardaba sus más grandes tesoros, todo lo que sus padres y los padres de sus padres le dejaron como valioso e importante. El pequeño duende estaba preocupado, la señora Luna al verlo tan desanimado le pregunto: -Tienes cara de abatido, pareces confundido, qué te pasa querido amigo. -El duende contó su gran preocupación y dijo-: -Luna, lunita tan bella y bonita, dime tú que lo miras todo ¿ves mi sombrero verde de algún modo? -No sufras más, pequeño duende, que yo sé dónde está tu sombrero verde perdido. Ante tal noticia, parecía que la vida como rayo cayó sobr

Ver hacia dentro sin cuestionar solo observar, sin alterar, solo ver pasar. Hincarse delante de sí mismo para aquietar. Sin pensar en nada, solo dejarse llevar por un único soplido, la paz. El alma aflorar sin nada que deliberar, eso es meditar.

Hoy por la mañana recordaba algunas cosas de lo que viví. Luego de todas ellas me reí, y agradecí porque vaya que aprendí. Me reí de mí, que bien me sentí, de verdad que bueno es avanzar y el vuelo alzar. Resultó refrescante, reírse de los errores y supuestas concepciones que en un momento eran reales ya no son. Reí, que bien me sentí.

(Ashley Castillo) Sube,  baja, da vueltas,  regresa,   es algo  tan curioso  y tan hermoso. El don de la vida es así,  como una montaña rusa,                cuando te subes  tu mundo  cambia por completo. Tu forma de pensar de la vida,  ya no es igual, simplemente  te das cuenta que  es un regalo  poder abrir los ojos,  un don,  disfrutarla a tu manera, es tu misión. No la dejes pasar pues es única y no volverá,  piensa bien cómo la usarás, pues no podrás  regresar atrás y la clave de esto, es la felicidad. 

Hay algo que me impulsa  a escribir, aunque tengo  que hacer otras cosas. Pero me transporta al mundo de las letras me provoca, me alimenta no tengo de otra, que escribir. En el hacer profano de  la vida, se nos olvida que sentir sin pensar es vivir. Percibir, que lo bueno te llega que todo lo que no pasa te espera, que lo mejor viene de repente, que la bondad se siente, que el amor es todo. Me siento en tantas formas  diferente, fascinada, estoy escribiendo feliz, embelesada.

No quiero que termine jamás esa melodía locuaz que susurra por dentro, que me hace vibrar. Que se quede eterna, que se grabe sin tiempo dentro de mí, es bella, que se quede siempre aquí. Hay una nota que noto que me transporta, con una pregunta en el tintero, soy yo lo que realmente quiero ser... Tanto por esclarecer, tanto por responder, tanto para trascender que no se duerma, que no se pierda que no termine jamás.

Con un toque de tu melodía puedo sentir el trastoque de mi alma que me pertenecía, y como se fragua toda esa alegría de tu armonía. Con un toque navegué en lo profundo del ser de tu mar que era tan tuyo pero al entrar se hizo tan mío. Tan solo con un toque.

Nada tan pleno que un suspiro profundo. Nada tan santo como el sigilo de la madrugada. Nada tan puro como el agua cristalina. Nada tan infinito como el cielo suscrito a elevar al hombre. Nada tan especial como el llanto que brota del encanto. Nada tan bueno como la sonrisa aunque sea desierta. Nada tan sabio como la verdad de la nada que todo es.

De eruditos y genios de grandes y pequeños la gracia divina de la inspiración. Melodías trascendentales de ángeles celestiales que evocan y provocan las más tersas y fieles sensaciones. Nobles y santos que como suaves pétalos hacen fluir sonidos maravillosos, todos ellos generosos. De facultades admirables legado de melodías singulares todas ellas, al alma penetrables.

Quietud tan profunda tan mía tan grande tan fuerte tan pura. Quietud a caso es parte de lo tuyo, tan cerca, tan distante tan limpia. Quietud afluente de todo concluyente en la nada, tan solo es una, de todas y ninguna. Quietud

Hojas que caen en remolinos suaves silbando al suelo, como flotando. Aves que besan la nube en bandadas revoloteando que buscan o que huyen. Chispas de lluvia, que con gracia melodías sobre la tierra van tocando. Matices de cielo, dobleces de nube, que recogen el frío en grises suspiros. Te suenan a algo, te envuelven en un devenir de palabras en el fluir de sentimientos. Todas buscan, callan, emergen y danzan, resuenan en tu interior, cierras los ojos a su tiempo van llegando, se mecen... te suenan a algo.

Te quiero contar una historia de un bello niño de pelo rizado. Su carita de ángel, casi siempre serio de poca palabra y dura sonrisa. Su mano pequeñita solo aprendió que mientras más fuerte pega, más se desquita. Que puede hacer si solo sabe querer con violencia, qué más puede dar, solo el grito del golpe que a otros ofende y que nadie entiende. "Necesito amor", "quiero que me quieran por favor". Joel, escucho tu pedido y en cada oración estás conmigo.