El Gusto de Escribir

Usa la fuerza positiva de tu mente, que tus  manos a tu corazón obedezcan. No dañes ni culpes a nadie, deja que las cosas bellas  crezcan. La vida te da la oportunidad de dar y recibir amor, deja de desconfiar, no cometas ese error. Usa tu fuerza para  cambiar,  y lo que este mal reparar. Las cosas buenas llegarán, si usas tu energía para brillar, no para insultar o golpear. Usa tu fuerza como el viento que iza las velas, tu voluntad, para lograr lo que te fortalezca. 

Mis cinco errores más grandes, creerle al ego sus mentiras gigantes. Ver separación, en donde todo es amor y su infinita unión. Evitar, evadir caer en aguas profundas, para ver ahí mis verdades más ocultas. Creer en la culpa inventada, de cosas que no valen nada, Sentirme arriba o abajo de alguien, por verlo con el ojo de la ilusión, sin darle espacio al corazón. Creo que son más de cinco, porque tengo uno de sobra, por si puedes aprender, te lo quiero dejar para leer. Sentirme abandonada, por qué si no estoy de universo separada. Parecen cuestiones fáciles de  asimilar, pero difíciles de dejar. Lo importante es despertar.

Hoy te doy la despedida, me doy cuenta que estaba equivocada. No, no te quería tanto como esperaba. Como un globo te dejo  libre, para que vueles plácido en tu vida. Amor y salud que siempre te sigan, suerte, pero  muy, muy lejos de mí. Yo me quedo aquí, feliz viendo de lejos tu recorrido. Aliviada y hallando cada vez más sentido, a lo que sin ti vivo, ahora que sí, si vivo.

Tú, mi querido amigo, siempre quieres ser reconocido, que te  adulen y te vean. Vives en una incansable comparación, en donde  disfrutas asignarte  mucha superación. Te contoneas entre el quiero y tengo, se te olvida agradecer, parece que lo bueno en otros no puedes ver. Desconoces qué es brindar, ignoras las cosas hermosas, creo que te cuesta mucho  apreciar. Un tiempo perdido el que  pasé contigo, hoy digo adiós  a tu visión equivocada, es hora  de elegir,  yo elijo ser amada. Adiós, ego, ya no te quiero.

Regocija el alma, un astro brillante al despertar. Un cielo anaranjado para un día feliz  terminar. Unas nubes con forma de pétalo de rosa, una cara  de virgen hermosa. Una sonrisa de azucena, un saludo de una persona buena. Regocija el alma, cuando se ve del mar con tanta calma,  constatar que no hay mejor ni peor, solo existe el amor. Las palabras claras y sinceras, la ayuda necesaria y sin espera, las flores de la primavera, es un regocijo para el alma.  

Acepto la paz, porque ya no lucho, es la calma de mi mente la que escucho. Acepto la paz, de no culpar a otros, ni mis temores proyectar. Acepto la paz de mi  interior, ya no juzgo, todos hacen su mejor papel en el sueño de la existencia. Se trata de tomar un poco de consciencia. Acepto mi paz, tu paz,  la paz del mundo, en un  gesto de agradecimiento profundo, acepto la paz.

Confía en el amor, todo lo inadecuado se hace poco, nada es tan complicado. No hay nada malo  cuando te das la  confianza como  regalo. Confía en el amor, es el mejor consejero, es la alegría del viajero de la vida. Confía, para dejar a un lado el miedo o la incomodidad, confianza, esa es la prioridad Sin engaño, ni dudas,  sin  quejas ni amarguras,  solo confía. Entonces observa como tu mirada brilla, tu sonrisa se llena de algarabía. Percibes lo bueno, lo duro como pasajero, al extraño como maestro. Disculpa que insista, pero es necesario, confía.  

Qué nadie borre tu calmada semblanza. Qué nada te llene de desesperanza, las cosas depositadas en el amor, las bendiciones alcanzan. No es necesario que te afanes en un torcido abecedario. Ahora debes trabajar en la calma conservar, busca los pensamientos que te traigan sosiego y puedas tus penas aliviar. La esperanza y la armonía te dan templanza, busca la quietud, en la vida esa es una gran virtud. Que nada robe tu paz. 

El primer paso será creer en ellos, estar libre de los miedos. El segundo paso es pedirlos, con la fe absoluta de que se gestan aunque tarde aparezcan. El tercer paso es observar su magia, entonces  podemos, con el corazón pleno, las gracias dar. Sí existen, sí son para ti, déjate llevar por ellos, es un abrazo acogedor, seguro y bello. Lo más importante es tener la absoluta confianza, de que los milagros en tu vida, son una alabanza del amor.

Si yo pudiera tomar  tu mano ingenua de ángel niño, pura e  inmaculada. Si yo pudiera llevarte por la senda del amor, sin que se mezcle ninguna clase de dolor. Si yo pudiera, darte algo diferente de lo que me ha acompañado por años, lo haría. Mas no puedo. Solo logro entregarte mi corazón, con todo y su ruedo. Las suturas y heridas que hasta para mí han sido desconocidas. Si yo pudiera, darte algo mejor, lo haría. Pero no dudes, ni por un segundo, que con todo y mi dolor  me entrego por completo  para compartir tu amor.

Invisible, sin que mis palabras fueran audibles,  porque se guardaban en el pozo del temor. Mil y una cosa en el cajón  de mi interior, por miedo a  hacer sufrir. Mas se guardaban  con dolor. Invisible, por creer en el error de que nadie me veía, sintiendo que la culpa era solo mía, si un problema acontecía. Sanar el dolor aletargado, por  tantos años guardado; respiro  ahora es imperceptible. Mi voz y mi imagen audibles  y visibles, para hacer de esta  vida el milagro de lo invencible.

Tienes el poder para decidir lo que quieres ser. La energía que irradias para que llene tu día. Las cosas que deseas resolver, los éxitos que puedan florecer. Tú decides, qué tanta luminosidad alcanzas. Las bendiciones y milagros con los que haces alianzas. Tú decides, si cosas  positivas generas y pides. Tú lo decides.