Llámame

                                                           
Llámame en la tarde
lánguida y solitaria
cuando creas que
mi ayuda es necesaria.

llámame cuando
creas que te haré
sonreír o quieras
de nuevo vivir.

Llámame por la mañana
o en la noche preciosa
cuando la Luna
se asome hermosa.

Llámame cuando
encuentres en el cielo
azul, la profundidad
de mi verdad.

Llámame cuando creas
que se burla el tiempo
de algún momento
del presente o del ayer.

Llámame, Dios.

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